Y
que calentones son los DUs sprints… ¿Y lo chulos que son?…
En
este peregrinaje hacia una de las “Mecas”, yo que iba a entrenar como un
domingo cualquiera… y van y me enrean…
Mi
“colega-poten” Alex me picó para ir a un Duatlón y testear las máquinas… Había
varias pruebas ese finde y podríamos ver hasta donde llegar… Top20? Top10?
Top5? Podio?
Pero
estamos locos o que? Jajajaj.
“Aquellos
maravillosos años” donde corrías a 3´30/km y hacías entre los 10 primeros… hoy
en cualquier romería te salen 20, 30 ó 90 que corren a esas velocidades… Casi
ná, oiga.
En
Alaquás donde nos plantamos, no había muchos, pero sí 4-5 que estarían ahí
delante. Siempre hay unos cuantos que por lo que sea, siempre la lían.
Dos
de ellos eran un jovenzuelo bien llevado por su míster Aguayo (destrozando a
muchos en un clasificatorio elite), y otro un “desconocido” que ya había
inaugurado la temporada valenciana de DUs además de varios recitales en otras
pruebas. Después, un ramillete de “fijos” en cabeza.
A
continuación, esperábamos estar los “nuevos” en esto (hace unos años que no
estoy a tope en este tipo de pruebas, por molestias o por no forzar en esas
distancias).
Esta vez me apetecía “probarme”.
(el de las gafas fosfo, detrás del de las compresivas fosfo, y al lado del, a la postre, vencedor...)
Salimos
vigilando dos “galgos” en bici, que van rápido a pie, pero también y, sobre
todo uno, que tiran mucho en bici.
El
objetivo? Fácil: aguantar un ritmo cercano de 3´30/km el primer 5k y en bici,
ir hacia delante, sin desfondar, pero intentar no separarse de “la moto” que
vendría por detrás. Y llegó. Y se fue.
Y
ahí se fue el podio.
Salimos
a sprint. Como siempre. Rápidamente nos pusimos a 3´26 el primer km… Vamos, lo
que era de esperar (si salía lenta la carrera…). Tras pasar ese 1ºkm… El
ganador Robles decidió irse. La siguiente vez que lo vimos fue en el primer
lugar del podio. Hizo la carrera solo. OLE!
El
segundo intentó seguirlo. Desde la distancia. También hizo su CRI particular.
Ni alcanzó al primero, ni lo cogimos.
Los
demás: a salvar los muebles cada uno como pudiera.
Yo
decidí controlar el ritmo, ya que iba con uno de los “marcados”, corriendo
relativamente fácil (5k en 17´45…, si se puede decir así…). Ahí empecé a
recordar mis “viejos tiempos”. Controlar la situación para en la bici y 2ª
carrera seguir progresando.
Ahí
me di cuenta que era un suicidio forzar un poco más el ritmo para entrar unos
segundos antes en la T1. El grupete pequeño tras cabeza de carrera se había
separado unos metros (a priori, salvables en la bici). Con ese favorito
podríamos “remar” e intentar contactar.
A mi
espalda se oía la respiración de un duatleta. No vi bien quien era la primera
vez.
En
cuanto nos acercábamos al final de la segunda vuelta, llegando a boxes, empiezo
a notar por mi izquierda que se está poniendo a mi altura. “El hombre de negro”
era Alex! “Quillo, ¿qué haces aquí? Estás muuuuu fuerte!!! No te despegues”.
Al
entrar en boxes nos cantan: “vais 9, 10 y 11”. Bien.
Rápida
T1 (bueno, salí el 3º de los tres… jajaja, pero el primero en subirme a la
bici) y al lío.
El
“poten” no iba en la Scotty. Y menos mal. Ibamos “fuertecillo”…
(Uno que iba a ser el primer cazado. Detrás JJ y yo pegado a su rueda. Alex, intentando no descolgarse)
Le
dije a Alex que no se separase, a rueda todo lo que pudiese, que yo colaboraba
con el otro “bicharraco” para ir hacia delante. Empezaba el juego.
Rápidamente
cogimos a uno. Légolas empezaba a marcar la tubería de la Scotty… jejeje.
En
esas al pedir relevo a ese nuevo integrante. Me ataca “mi compañero”. Salgo a
por él y le digo que no haga eso, que yo colaboro, que si empezamos así, mal
vamos. Alex no aguanta los arreones y se queda. Me supo mal. Se había esforzado
para estar delante del otro “bicharraco” que vendría por detrás enseguida.
Y casi con la primera vuelta finiquitada, enlazamos con el grupeto
perseguidor del dúo de cabeza pero nos alcanza también “el canalí”. Y no viene
Alex a su rueda. Mala señal. Irá muy fuerte.
Y
nada más llegar, arranca en el repecho de un puente. Como los buenos ciclistas.
Confusión y “zasca”. Así se dan los palos. Ole.
En
el grupo nos miramos. Nadie sale. Todos piden relevos. Que si “tira tú”. “No
tú, que yo no puedo”… jajajajaj. #ILoveThisGame
Yo
que voy 4º o 5º del grupeto de 10 decido ponerme a tirar. Porque si no se iría.
Era uno de los fijos que no se conformaría con ir en grupo.
Al
inicio de la 2ª vuelta lo alcanzo y entonces pido relevos y me pongo 3º. Me
piden que pase otra vez…
¿Pero
esto qué es? He tenido que tirar yo para alcanzarlo y no me dejan ni respirar.
Me piden que siga tirando y encabezando los relevos.
Señores,
me considero más ciclista que duatleta. Saco bidón, me echo a la derecha y dejo
que pase todo el grupo. No soy nuevo en esto. Me pongo el último de los 10. No
daría un relevo más.
Casualmente, mi “compi” desde el inicio de carrera va justo delante mía. Ha leído la situación y ha elegido lo mismo que yo. El podio está lejos. Nos lo jugaremos, el 3º puesto, entre los del grupo.
Pasa
la 2ª vuelta y nadie parece que quiera tirar fuerte. Se van pasando algunos
relevos pero sin mucha intensidad. Y justo empezamos la tercera vuelta.
En esa
última plaza, aunque sufres algunos latigazos, no me castiga y puedo ir viendo
los movimientos de todos. Pasamos al lado de boxes y empieza la última vuelta.
El “canalí” arranca justo antes de una rotonda que hay metros previos de otra
subida al puente. ¡Cómo se nota! Uno de los mejores sitios para atacar.
Coge
la rotonda como se debe (sin tocar freno) y sigue apretando en la subida.
Del
grupo no sale nadie. El típico acelerón pero el que encabeza el grupo se aparta
a mitad de puente. Yo estoy muy atrás para salir. Y no voy a repetir. Que tire
ahora otro.
Pero
nadie lo hace. Entre doblados y desorganización se nos va. Cada vez está más
lejos. ¿Lo perderemos?
Van
pasando los km y, miope de mi, ya no lo veo en la distancia. El 3º puesto se
está escapando.
En
un abrir y cerrar de ojos, estamos en la T2. Al ir el último veo cuando se
empiezan a “descalzar” y yo hago lo mismo, pero me adelanto a todos, para así
cuando estén todos “en faena”, pasarlos con los pies ya fuera de las zapas.
Justo en ese momento de ir adelantando, algunos de los primeros del grupo se equivocan y parecía que iban a iniciar otra vuelta. Esquivo a los que se habían confundido y entro primero en la T2.
Jorge
me canta “vas 4º, vamos!!” Le pregunto: “¿4º?”
Ufff,
¿a cuanto irá el “ciclista”? ¿Cuántos me pasarán del grupo en el que voy?
Hago
la transición todo lo rápido que puedo (las plantillas me dejan poco hueco en
las zapas y tardo un pelín más de lo normal en quitármelas y ponérmelas), pero
consigo salir y mantener esa 4ª plaza.
Como
decía mi “rival favorito” Rorro: “la salida de la T2 siempre a tope. Así, que
se peguen el calentón para recortar esos metros tan valiosos”. Y así lo hice.
Salí
por el parque casi patinando de lo rápido que (pensaba que) iba. Pero sin mirar
atrás y menos mal, porque llevaba unos cuantos pegados a mi cuello.
Pero
a los 500m me pasó mi “compi del Du” (J.J.). Uff, 5º…
Pero
justo al adelantarme noto que baja un punto el ritmo. ¿Se habrá pegado el
calentón que decía Rorro?
No
lo pienso más y decido cambiar. Es ahora o nunca.
Le
adelanto diciéndole que no baje el ritmo, que hay que seguir (“políticamente
correcto”, como me dice BIG que sea… ;)
Sigo
apretando todo lo que puedo para despegarlo. No miro atrás. No se da pistas a
los rivales.
Y
sigo apretando. Los voluntarios me animan.
Voy
tan forzado que la cinta del pulsómetro se me baja a mitad de la “panxeta”.
Necesito aire de donde sea y en cada inspiración “estrecharía” tanto el tórax
que se me caía la banda hasta la cintura… jajajajaj.
Estando
yo en esas “cuestiones de corazón” a lo lejos adivino alguien corriendo… (me
estoy pensando lo de las lentillas, operar…. Jajajaj).
Y
sí, es el 3º… Los voluntarios de las
calles me animan diciéndome “lo tienes ahí, aprieta”.
Hombre,
“ahí ahí”?? tampoco, pero sí, está cerca…
Él
que los oye, mira atrás. Mal.
Me
das esperanzas.
Saco
otra vez ppm de donde creía que no quedaban (ver último repunte de FC en la
gráfica)
Continúa
el callejeo “a tó trapo”. Y al “torcer” cada esquina, aprieto. Cómo él supongo
que haría también. Pero en cada recta veo que me saca un poco menos que en la
anterior.
Sigue
mirando atrás. Sigo apretando.
Paso
por la marca del km 2… Mala señal… Esto se acabará enseguida y aún me queda un
trozo para alcanzarlo…
Los
voluntarios siguen gritando. El girándose. Yo apretando.
Pero
en ese último giro, salimos al parque. Estamos llegando al final.
Él
entra al parque entre un árbol y una farola (quién puso ese árbol ahí en
medio?).
Me
saca unos 50m o menos. Yo me agarro al árbol para pivotar y se me resbalan los
pies con la arenilla del suelo del parque. Iba derrapando en las curvas “estilo
Rossi”. Casi me caigo.
Y
justo al girar veo el arco de meta a lo lejos. No lo cogeré. Se ha ido el
tercer puesto.
Sigo
corriendo pero ya bajando revoluciones. Se nos fue el podio. En la bici. Y eso
que sabía que podría liarla. Y la lió. Pero es lo que hay. Las “carreras
ciclistas” son así. Y él arriesgó y ganó. Y aguantó corriendo (su cara así lo refleja…).
(Gran carrera del "canalí"! No lo conozco en persona, pero es de ser bueno saber que eres vigilado, que saben todos que atacarás y aún así, atacar, irte y mantener la posición. OLE!!)
Más
de 30´´ eran casi imposibles de recortar en 2,5km.
Miro
atrás y el 5º viene a lo lejos.
Me
quedaré con la medalla de chocolate. Bueno, está rica también ;)
Así
que mientras los tres primeros están haciéndose la foto justo tras la meta, yo hago
mi “llamada” en la misma línea.
No
pudo ser 3º de la general, pero al menos, por el “pipiolo volador”, fui 3º
senior/absoluto (podio no oficial).
Esta
vez el “podio sorpresero de cada marzo”, no tuvo recompensa final, al menos
para el recuerdo gráfico. Pero sí mental.
Alex
entró 14º después de una bici con cabeza tras los arreones iniciales y otra
segunda carrera buena. Ahí mejorando el tío.
Después
del reencuentro con el “mundillo” y saludar a amiguetes y ACC, nos fuimos a
rodar 1h30 para “soltar patillas” (ni el masaje quitó las agujetas que tuve durante 3 días...), que el juego continúa pronto.
Tras
más clases y “trail-training” por el CAR de Vallirana… vaya tela con la “cuesta
infernal” donde entrenan Gema y Elias…!!!! Así también me pongo yo fuerte…
jejejej.
Pero
esto sigue. Esa parada duatlética ya ha quitado la carbonilla.
#SeguimosParaBingo
#2015aFull
Saludos
See
you soon
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